Los cerramientos de hormigón son elementos constructivos utilizados en edificación que consisten en paneles o muros fabricados con hormigón, cuya finalidad es delimitar y cerrar los espacios exteriores de un edificio.
Estos cerramientos no sólo proporcionan protección y privacidad, sino que también contribuyen a la estabilidad estructural y al aislamiento térmico y acústico del edificio o nave.
Este tipo de cerramientos para naves es una solución prefabricada que destaca por su economía y resistencia en el sector industrial, agrícola y ganadero.
En este espacio, te presentamos las opciones más utilizadas en la construcción de cerramientos para naves, con especial enfoque en la colocación de placas alveolares y paneles prefabricados, los cuales se adaptan a distintas necesidades y requerimientos.
Las placas alveolares son elementos prefabricados ampliamente utilizados en el cerramiento de naves agrícolas debido a sus excelentes propiedades económicas y su alta resistencia. Estas placas, fabricadas en hormigón, ofrecen una solución duradera y eficiente para proteger y delimitar el espacio interior de las naves.
Una característica destacada de la placa alveolar es su montaje horizontal, una práctica común en muchas obras agrícolas. Esta disposición permite una rápida y sencilla instalación, optimizando así los tiempos de construcción y reduciendo los costos asociados.
En ciertas obras que requieren un cerramiento con propiedades térmicas y acústicas superiores, se opta por la colocación de paneles prefabricados. Estos paneles, compuestos por capas aislantes entre dos revestimientos exteriores, proporcionan una mayor eficiencia en el aislamiento interior de las nave industriales.
Esta opción es particularmente común en el sector ganadero para la realización de naves destinadas a la cría de porcino, donde se requiere un control más preciso del ambiente interior para garantizar el bienestar de los animales.
En naves de porcino, se utiliza la pared aislante tanto en espesor de 15 cm como en 20 cm.
Cuando se opta por la instalación de paredes aislantes, se pueden encontrar paneles con diferentes espesores. Los más utilizados son aquellos de 15 cm y 20 cm, cada uno ofreciendo ventajas específicas según las necesidades particulares de la construcción.
Las placas alveolares destacan por su economía y resistencia, mientras que los paneles aislados ofrecen un mayor aislamiento térmico y acústico, además de opciones estéticas. La elección entre ambas opciones dependerá de los requerimientos específicos de cada proyecto.
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